Lectores!!!

miércoles, 26 de septiembre de 2012

Capitulo 29

Hola!!

Les dejo el cap de esta  semana, me tarde  lo sé, pero ustedes verán porque!!

Les dejo el cap!


Escuche claramente cuando se corto la  llamada y suspire.- Hasta  mañana Silver, te amo.

Si, la amo más que nada en este mundo, lo confirme en estos días que estuve sin ella.

Y se lo tenía que decir, ya  no lo podía  callar.

Baje a la estancia donde  mi madre se encontraba.
-¿Ya le  hablaste? –Me pregunto ella muy concentrada viendo un programa de televisión.
Me senté a su lado y solté un gran, pero gran suspiro.- Si, acabo de colgar con ella.- Le dije con miedo.- Mañana  llegando a Los Ángeles iré a su casa y la llevare a un lugar.
Mi mamá  apago la televisión.- Mi amor ¿Seguro quieres hacer esto?
Me gire sorprendido por su pregunta, ella era la que me había animado a expresarle mis sentimientos a Silver.- ¿Ya cambiaste de opinión?
Mi madre carcajeo.- Claro que no mi amor, pero por lo que me contaste de ella y como termino  su ultima cita.
-No fue cita.
Mamá me tomo de las manos.- Tom, desde la primera vez que  saliste con ella, fue una cita. -Me quede pensando en la idea, en ocasiones nos  tomamos de la mano, yo la abrazaba con frecuencia, le acariciaba  y cosas así “Tal como una pareja”- Ahora te das cuenta ¿Verdad?
-No lo había visto así.
-Lo que tengo miedo es que cuando hables con ella, no uses las palabras correctas.
La  vi  atento y confundido a la vez.- ¿Crees que soy incapaz de hablarle bonito?
-Creo que ella te acepta como eres.- Me dijo mi mamá.- Si no te hubiera botado definitivamente  la última vez que se vieron.
-Me dijo que éramos amigos.
-Porque tú no te has sincerado con ella.- Me recalco mi madre.- Mira cariño, esa niña es dulce y tiene algo que tú debes de cuidar y proteger, su discapacidad no es cualquier cosa.
-No ha sido un problema hasta ahora.
-Y eso es bueno, pero no significa que siempre sea así.- Me dijo ella.- Si realmente la amas, debes de estar con ella  en las  buenas y en las malas; cosa que no hiso su ex novio.
-Eso lo sé mamá.- Acepte.- Yo la amo y tratare de hacerle la vida más  fácil posible.
Vi como mi mamá me veía  detalladamente, creo que tratando de ver a través de mis ojos, mi alma.- De verdad estas enamorado.- Dijo con un nudo en la garganta.- Quiero conocerla Tom.- Casi me ordeno.- En cuanto ustedes hablen quiero que me digas y yo tomare el primer  vuelo que encuentre.
Me le quede viendo sin responderle.

Narra Silver

No pude dormir…. Nada.

La idea de platicar con Tom me tenia muy inquieta porque no sabia de lo que quería decir.

La noche anterior  Sam me aseguro que  Tom estaba decidido a decirme lo que siente  por mí, pero honestamente no lo creo ¿Cómo podría amar a una  persona  como yo?
-Buenos  días  bella durmiente.- Me saludo Sam cuando entro a la habitación. –Ya es hora de levantarte, que hoy es un gran día.
-Creo que estas viendo cosas donde no las hay.
-No lo creo.- Aseguro ella.- ¿Sabes  porque?
-¿Por qué?
-Porque  Bill me ha dicho que en la noche cenaremos los dos  fuera de  casa.
Reí.- ¿Y eso que Samantha?
-¿Cómo que eso que? – Expreso.- Tú estarás sola cuando Tom llegue.
-¿Sola? –Eso definitivamente no me lo esperaba.
-Si, de hecho te llevaremos a  su casa, para que no te quedes sola  aquí.
-Me siento más segura  estando en mi casa.- Le dije con nervio.
-No, te iras a su casa y ahí lo esperaras.- Me dijo decidida.- De hecho con la  esperanza de que  ustedes…. Bueno ya sabes.- Le avente la  primera almohada que encontré.- Estúpida.
-Te lo merecías  por estar alucinando.
Sentí como Sam se sentaba en la orilla de la cama.- Te quiero pedir un favor.
-Por ahí hubieras empezado.- Le dije.- ¿Qué se te ofrece?
Samantha se aclaró la garganta.- Quisiera  tener una velada intima con Bill.
Reí.- Huy ¿Es enserio?
-Si, quiero preparar algo lindo, ya sabes especial.
-¿Qué has pensado?
-Una cena romántica y  bueno lo demás se ira dando poco a poco.
-¿Aquí en la casa?
Sam tomo de mi mano.- ¿Podrías quedarte con Tom? Por favor, por favor, por favor.- Me rogo.
-Enserio te volviste loca ¿Verdad? –Le exprese.- ¿Cómo me voy a quedar  con el?
-Yo no dije que exactamente con el.- Me dijo ella  con un tono de picardía.-Yo decía que te quedaras en casa de él. –Me sonroje.- Ya si tu te quieres quedar con el, pues es tu decisión.
-Cállate.- Le dije.
Estallo en carcajadas.- No ya enserio ¿Harías eso por mí?- ¿Por qué me hacia esto? Justamente  hoy, cuando el miedo se apodera de mí, cuando tengo los  nervios  de punta y la  pura idea de estar cerca de  Tom me  pone  tensa ¿Por qué?- Por favor primita, solo será esta noche.
“Dios  ¿Por qué?”- Bill ¿Ya lo sabe?
-Le he dicho que le tengo una sorpresa, pero no sabe exactamente que.
-¿Cómo le harás?
-Pues le diré cuando lleguemos.
-¿Y yo?
-Aprovechare tu situación con Tom para  esto, le diré que  prefieres  platicar con el a solas y que  a mi se me  ocurrió que cenáramos  los dos aquí y que recibas a  Tom allá en su casa.
-¿Crees que quiera?
-Si.- Aseguro ella.- Dime que si por favor, por favor.
Resignación. –Está bien.
Sentí los brazos de mi prima rodearme  muy  fuerte.- Como te quiero Silver, mil gracias.

Narra Sam

Después de convencer a Silver  de que pasara  la noche en la casa de los gemelos, ella  y yo nos fuimos a desayunar.

Ya en la tarde…

Las dos ya habíamos  preparado todo para la  velada íntima que  le tenía preparada a mi novio. Dejando el lugar  espectacularmente romántico y perfecto. Ya le había llamado a Bill y le dije que Silver se quedaría con su hermano en su casa, me  dijo que le diría a Tom que llegara a su casa en lugar de la mía. “Creo que todo estaba listo”

Cuando llegue con Silver a la estancia; lugar donde ella ya me esperaba con su bolso (Donde llevaba ropa de dormir) listo.
-Hueles a sexo.- Me dijo después de olfatear un poco con sarcasmo.
-No seas ridícula.- Le dije yo mientras le golpeaba el brazo.
Ella riendo se acomodó en el sofá.- ¿Qué vistes?
-Uno vestido muy bonito.- Le dije viéndome un poco.- Es negro completamente, lo uso con unos zapatos morados perfectos.
Ella negó.- Pensé que usarías un baby doll súper sexi.
Le avente un cojín.- Deja de  burlarte Silver, que estoy  nerviosa.
Ella sin dejar de reír pregunto.- ¿Por qué?
-Mientras me ducha pensaba en cosas  extrañas.- Le dije sin pensar.- Es el una estrella de Rock, lo mas seguro que ha estado con muchas mujeres y sea un experto en eso ¿Y yo?...
-Samantha Tate, no quiero saber cuales son tus  fantasías sexuales con Bill mientras te duchas.
-Silver, calla que no es  gracioso.- Le regañe.
-Lo siento Sam pero estas demasiado nerviosa.- Me dijo ella mientras se calmaba.- Bill te ama  tal y como eres, y para el hacer el amor contigo será el mejor  placer del mundo, porque eres tu con la que él esta y eso  para él, no tiene  precio ni comparación.
Una vez mas mi prima me  animaba, tenia ese don de hacer sentir bien a la gente.

Escuchamos el timbre sonar y de inmediato nos pusimos de pie.

Narra  Bill

Escuche a través de la puerta como las dos  caminaban hacia la entrada.
-Hola  guapo.- Dijo Sam de inmediato, sin abrir bien la puerta.
-Hey.- Le dije.
-Vamos.- Dijo ella jalando a Silver cerrando la puerta detrás de ella.
-Hola Bill. –Me saludo Silver mientras seguía siendo jalada  por mi novia.
-¿A dónde van?
-A tu  casa.- Me dijo Sam.- Iremos a dejar a Silver.
-Pero Tom tardara tres horas mas o menos en llegar, pensé que cenaríamos primero.
Las dos  se detuvieron y vi cuando Sam le dio un pequeño codazo a Silver.- Ahhh yo ya comí y bueno como tengo un poco de trabajo, pues pensaba aprovechar el tiempo mientras espero por tu hermano.
-¿Segura?- Le pregunte aun confundido.
-Si guapo.- Me respondió Sam.- Ella esta bien segura ¡Vamos!- Sin decirme  mas, las  chicas se adelantaron y Sam le abrió la puerta de mi coche a  Silver para que entrara y segundos después, ella entro.- ¡Vamos  guapo!
Camine hacia el coche y entre de inmediato.- ¿Todo bien guapa?- Le pregunte a mi novia.
-Si.- Dijo ella de inmediato.

Durante  el camino Silver venia callada, no decía  absolutamente nada y eso me  llamo la atención.
-¿Tom te llamo antes de despegar?- Le pregunte.
Ella negó.- No, desde ayer me dijo a que  hora llegaría y eso.- Me respondió ella.- A ti ¿Te hablo?
-Si.- Le respondí.- Y le dije que  se fuera a casa, que ahí lo esperarías.
-Gracias.- Me dijo ella.
La mire otra vez a través del espejo retrovisor y  vi como movía las  manos.- ¿Nerviosa?
-Si.- Me respondió de inmediato para después arrepentirse.- Digo no, solo un poco preocupada.
-¿Preocupada porque?
-La ultima vez que nos dimos, ni si quiera adiós  nos dijimos.
-De eso hablaran.
-Si.
-Y mientras ellos hablan tú y yo, cenaremos algo que nos prepare.
Reí  ya que amo como cocina Sam. –Eso me parece una buenísima idea.

Narra Silver

Me sentí demasiado extraña cuando me dejaron en la casa de  los chicos.

Cinco de la tarde, ha esa  hora yo ya había  terminado mis  labores y en estos  momentos esperaba con ansias  las  llegada de él, ya que no me sentía  a gusto en su hogar, sola y menos con esta lluvia que  se dejo ver hace una  hora  aproximadamente.

Los truenos eran muy  frecuentes, haciendo vibrar las ventanas muy fuertes y honestamente estaba  muerta de miedo. Tome  mi teléfono y marque  una  opción que me dice la  hora.
-Cinco y treinta.- Dijo la voz femenina.
Suspire.- Bueno, falta menos.- Me senté en el sofá y me quede pensado en que pasaría cuando el llegara.

Narra Tom

Esto no me podía estar  pasando a mi “Un  retraso en mi vuelo”

Según había entendido en Los Ángeles estaba lloviendo muy fuerte y  por eso teníamos que dar un par de  vueltas antes de llegar a la  ciudad.

Eso me estresaba, Silver estaba esperándome en mi casa  y aun me  faltan un par de horas para llegar, vi mi reloj y eran las  seis quince de la tarde.
-Maldición. –Vi que una sobrecargo venia hacia estos rumbos.- Disculpe.
La  chica se detuvo y me sonrió.- ¿Si?
-¿Cuánto tardaremos en llegar?
-No estamos seguros aún señor.- Me dijo ella.- Puede que tome  un par de horas mas.
-¿No se puede hacer nada?- Le pregunte.- Me urge llegar a Los Ángeles.
La chica negó.- Me temo que no, es una tormenta eléctrica muy fuerte.- Dijo ella.- Tranquilo señor, créame no es el único que le  urge llegar.

Narra  Sam

Bill se quedo con los  ojos  abierto cuando abrió la puerta de mi casa y entramos.
-¿Por eso no me dejaron entrar  verdad? –Yo asentí.- Wow, jamás me había  preparado algo así.
Emocionada le di un beso justo en el momento que un rayo ilumino la estancias.- Así o mas perfecto.- Le dije  yo antes de besarlo de nuevo.

En la cena mi novio estuvo súper atento conmigo, me dio de comer en la boca (Cosa que pensé era  bastante tonta, pero al momento que la vives con la persona que amas, es simplemente perfecto) Platicamos, me canto un poco y  nos dimos miles de besos.
-Gracias  guapa.- Me agradeció el.- Es la mejor sorpresa que me han dado en mi vida.
-¿Enserio?- Le pregunte emocionada por sus palabras.
Me sonrió tan lindo antes de darme un beso.- Te amo y  te amare hasta el fin de mis días.- Me dijo antes de darme un tierno beso. - Años esperando por ti, años esperando a la mujer perfecta para mi y al fin la encontré.
-Son palabras muy lindas.
-Y muy ciertas.- Me dijo el.- Te amo y quiero estar contigo.
Me sonroje, no pude evitarlo.- Yo también.
Bill sin decirme mas  me beso con un poco  mas de pasión, me  beso como nunca me había besado y me sentí tan bien por ahí él me decía que tenía  las mismas  ganas que yo, de  ser uno.- Quiero hacerte el amor, hoy  mañana  y siempre.
¿Cómo no enamorarme de el con esas palabras?

Narra Silver

Abrí los  ojos “Dios, me había quedado dormida”

Busque mi teléfono, y  cuando lo encontré oprimí  una tecla para que me dijera la hora.
-Siete y veinte.- Dijo una vez mas la voz femenina.
-¿Qué? –Me senté en el sofá sintiéndome impotente, porque no conozco la casa de  Tom  y estar aquí sola según yo esperándolo y el ni sus luces.

“¿Qué hago?”  No podía llamarle a  Sam porque ella tenía un plan  muy bonito con su novio y no quería interrumpirlos, seria descortés de mi parte. Y ¿Si le  llamo a  Tom?

Marque la opción numero uno y en cuestión de  segundos, el teléfono me mando a  buzón de inmediato.

Sin saber que hacer  me acomode mejor en el sofá  y trate de pensar en que hacer, pero los  minutos pasaban y yo seguían sin saber que hacer.

Narra  Bill

Hacer el amor con la mujer que amo.

Es el momento mas perfecto que he tenido en mi vida y no era únicamente haciendo el amor en estos momentos, era siempre, porque  con ella no solo hacia el amor ahorita, lo hacia siempre  a través de una mirada, una sonrisa, un beso o una  caricia.

La amo y sé que ella me ama de la misma  manera.

Narra  Tom

Diez de la noche y yo apenas  saliendo del aeropuerto.

Silver debe de estar desesperada  y lo peor sola en un lugar que no conoce.
-Maldición. –Cuando subí al taxi, llame al móvil de  Silver pero esta no me contesto.- Lléveme a esta dirección por favor.- Le dije al conductor.

No deje que el taxi se estacionara  bien, cuando le di cincuenta dólares y abrí la puerta para ir corriendo a la casa, ya había llamado a la casa y nada, mismo caso con el móvil de  Silver y para  rematar mi hermano tampoco me contestaba.

Entre a la casa  y vi la luces apagadas, las prendí de inmediato y se me rompió el corazón al ver a Silver con los audífonos de su IPhone  puestos y ella dormida, me acerque a ella y vi como se abrazaba a si misma del frio que tenia, busque  una  cobija y la  cubrí, quedándome viéndola por unos largos minutos.


Una  hora después  Silver  se movía un poco, lo que vi indicando que estaba por  despertarse y cuando abrió lo ojos, por  primera vez  me vi reflejados en ellos.

Ahí vi a un nuevo Tom, un Tom que ella había descubierto, un Tom que  ella  creo, un Tom que  estaba  completamente  enamorado de ella.
-Tom ¿Llegaste?
Sonreí ¿Cómo se dio cuenta?-  Si.
-¿Qué hora es?
-Me da pena  solo decirlo.
-¿Qué paso? La última vez que  escuche la hora eran las siete y  veinte.
-Son las  diez  y media. –Le dijo tomando su mano.- Perdóname, hubo un retraso por la  lluvia, el avión no podía aterrizar.
-Te llame y me pasaba  a  buzón.
-No había señal y cuando llegue te marque pero nada.- Le dije.- También llame a  Bill pero igual.

Silver me  conto todo el plan de  Samantha  y reí ante  la idea.
-Es mejor no molestarlos.
-Creo que no.- Le dije con burla. –Pero mejor hablemos de otra cosa.
Silver se acomodó mejor en el sofá y apretó mi mano.- Te extrañe.
-Yo te extrañe mas, no tienes idea de cuanto.
-¿Por qué te fuiste sin despedirte?
-Llegue afuera de tu casa y estuve a punto de tocar, pero no encontré  la  manera de pedirte perdón por la forma en la que me comporte.
-No eras el único.- Me dijo ella.- Yo también me quería disculpar contigo por como reaccione.
-Reaccionaste de la manera que tenias que hacerlo.- Le dije  tratando de que ella borrara cualquier culpa. – Lo que paso me hiso reaccionar, me hiso darme cuenta de  muchas cosas.
-¿Cuáles?
-De nosotros.- Le dije.- De lo que significas para mi.

Narra  Silver

“Lo que significas  para mi” Palabras que  golpearon mi corazón de una  manera sorprendente.
Tartamudeando  de los  nervios, le  dije.- No entiendo.
Tomo mis dos manos y la puso en su corazón. – ¿Sientes esto?- Me pregunto.
“Dios” –Si.
-Es lo que siento cada vez que estoy contigo.-  Me dijo.- Cuando estoy contigo, te siento mía y de nadie más, por eso me comporte de esa manera en la oficina de  Kaleb.
-¿De que estas hablando? –Le pregunte más emocionada que nada, según lo que estaba entendiendo, Tom me estaba diciendo que siente cosas  por  mí,  quizás el sienta lo mismo que yo.

“Dios santo” No podía creer lo que estaba  pasando.

Sentí los labios de él, rosando los míos con un  beso.

Narra Tom

La bese con un tierno y lleno de amor.


sábado, 15 de septiembre de 2012

Capitulo 28

Hola chicas!!!

Siento no haber subido cap, pero he estada mas que  ocupada, pero como recompensa le dare una cap largo y con un final de diez!!!

Pero hoy si dejo!!! =D

Paso a comunicarles que ya publicare los domingos o lunes de cada semana.

Les dejo el cap!



-No digas tonterías.- Le dije  de inmediato, eliminando esa idea.
Ella rio.- Eso tiene que ser.- Aseguro ella.- Tom esta enamorado de ti.
-Deja de decir tonterías.- Le exigí.- El me ve como una amiga  indefensa a la que tiene  que  proteger.
-No lo creo.
-Así es, no es la primera  vez que me dice que  Kaleb no es de su agrado.

Le pedí de la manera mas atenta  que de  dejáramos ese tema  por la paz, porque simplemente me esta volviendo loca y en estos el momento mi cabeza estaba explotando.


En la mañana siguiente me levante sin mucho animo, ya que toda la noche me la pensando en el.

Lo quería, claro que lo quería ¿Cómo no iba hacerlo? Siendo como es conmigo.

Era atento, detallista, tierno, educado y mas cosas que a millones de mujeres derretiría y para mi mala  suerte yo estaba dentro de esas  millones de mujeres. 

Narra Tom

En la  mañana siguiente me desperté, bueno si se puede decir que desperté porque no puede  dormir bien en toda la noche, pensando en lo que había  pasado la noche anterior.

Sorprendido conmigo mismo al darme cuenta de lo idiota que fui al descubrir mis sentimientos  hacia ella, por medio de los celos ¿Celos?

Celos  a ver la  posibilidad de  perderla, de no tenerla a mi lado, miedo de que para ella  haiga una  persona mas importante que yo ¿Existirá esa persona?

Simplemente no sabia que hacer, tenia miedo de que ella no sienta lo mismo que  yo,  miedo a que ella vea en mi solo un amigo y nada mas, miedo a la posibilidad de que ella sienta ya algo por alguien mas.  Admitiendo que al aceptar que  estoy enamorado de ella,  no significa que buscare una relación con ella.

No se enojen, pero sé que yo no soy lo suficiente para ella, Silver se merece a un buen hombre, no un chico que ha vagado de mujer en mujer buscando llenar un vacío, un vacío que ella  lleno sin tener ningún tipo de contacto sexual.
-¿Tom? –Me llamo mi hermano al otro lado de la puerta.
“Bill, puede aconsejarme” Pensé.- Adelante.
Mi hermano entro a la habitación y se sentó en la esquina de mi cama.- ¿Entonces?- Pregunto.
Confuso le pregunte yo.- ¿Entonces?
-Enamorado de Silver.- Dijo mientras arqueaba la cejar.- Tengo que decir que eso ya  lo sabía.- Argumento con una sonrisa de satisfacción.
Le avente la primera almohada que encontré.- No te rías que es algo serio.
-Sé que lo es  Tom.- Me dijo mi hermano. – Pero es algo bueno, ella esta hecha para ti y tú para ella.
-Con eso aseguras que ella  siente algo por mi.- Le dije con una emoción espontanea, ya que él no podría asegurar eso… al menos que el.- ¿Ella te ha dicho algo?
Negó.- No, pero estoy casi seguro de ello.
-¿Por qué?
-Son lo que el otro necesita, se ve en como se comportan cuando están justos.- Me dijo Bill.- Es  como si tu necesitaras de ella para respirar, de la misma manera que ella necesita de ti para respirar.
Suspire.- Necesito de ella  para respirar.- Admití  y mi hermano sonrió.- ¿Qué?
-Se escucho tan lindo saliendo de tus labios.
-Cállate, que enserio no sé que hacer.
-¿Cómo que no sabes?
-¿Hablas enserio? Bill yo no soy la mejor opción que ella puede tener.- Le dije  enojado conmigo mismo.- El estilo de vida que he  llevado no es algo que ella pueda aceptar.
-Y ¿Cómo lo sabes? Ella esta a tu lado a pesar de eso.
-Pero como amigos.
-Desde hace mucho que no son amigos Tom.- Me dijo Bill.- Tienes que ser honesto con ella, es lo que ella espera de ti.

Yo lo mire dudando, por segunda  vez en mi vida me  siento impotente  por sentir  que perdía la seguridad en mi mismo.

¿Era realmente bueno para ella?

Narra Bill

Sabia que mi hermano tenia muchas dudas, lo podía ver en su mirada y no solo  nervios, también miedo.

Tom Kaulitz ¿Con miedo? Difícil de creer.

Yo lo veía atento, esperando el momento que el me comentara algo, pero no, estaba callado.
-¡Bill! ¿Cómo he podido olvidarlo? –Casi grito. -¿Cómo te fue con Sam? ¿Te dijo que si?
Agache mi mirada de lo emocionado que me ponía recordar la tarde de ayer.- Fue todo lo contrario a lo que tenia pensado.
-Pero ¿Te dijo que si? –Me pregunto y yo asentí.- Pero ¿Cómo fue?
-Si, al inicio me armo un lio porque no le había  dicho  que estaba enamorado.

Le conté a mi hermano a detalle todo lo que había  pasado con Samantha y  me dio gusto darme cuenta de que el compartía mi felicidad a pesar de la tremenda  confusión tenia en estos momentos.
-En verdad me da mucho gusto Bill.- Me dijo Tom.- Samantha es la mujer perfecta para ti.
Yo asentí con gusto.- Lo sé, así como sé que Silver es la mujer perfecta para ti.

Tom se puso de pie y camino un par de minutos  de un lado a otro.
-Bill no se si yo pueda ser esa persona que la pueda hacer feliz.
“Ciego, eso era mi hermano… Un  ciego”  -Tom ¿Has visto como sonríe cuando esta contigo?
-Su sonrisa.- Dijo el riendo mientras seguramente recordaba la sonrisa de la prima de mi novia. - Tengo que pensar  Bill.
Tenía muchas dudas,  y solo alejándose un poco podría aclararlas.- ¿A dónde iras?
Él se encogió los  hombros.- No lo sé.
-Deberías de ir  a ver a  mamá.
Tom se detuvo y me vio.- Ya le has dicho ¿Verdad?
Me encogí los  hombros.- ¿Le dirás a Silver que te vas?

Narra Sam

Abrí la puerta de la habitación de  Silver  y vi que ella  no estaba ahí.
-¿Silver? –Le  llame.
-En le baño.- Me grito.

Espere a que saliera y se  cambiara para decirle lo que había pasado anoche con Bill.
-¿A que se debe esos nervios?- Me dijo mientras se cepillaba el cabello.
-¿Nerviosa? ¿Yo? –Le pregunte.
Ella rio.- Suéltalo Sam.
Me sorprendía cada día con la intuición de  Silver, esta chica se da cuenta de muchas cosas, muchas. –Bill y yo somos novios.- Le dije en seco.
-¡¿Qué?!
-Si, ayer cuando nos quedamos solos me dijo que la canción de ayer era para mí.
-¿Enserio? No lo puedo creer.
-Yo tampoco.
-Cuéntame.- Dijo mientras me  buscaba para sentarme a mi lado. -Quiero lujo de detalle.

Narra Silver

No podía  negar la felicidad que me  daba  lo que Sam me estaba  contado, se escuchaba tan contenta, tan emocionada que me  contagiaba el animo.
-No lo puedo creer.- Acepte.- Y tu ya  casi queriéndolo matar.
Sam estallo a  carcajadas mientras sentía que se recostaba en la cama.- Si, lo hubieras visto.

Me quede pensando en la diferencia entre  Bill  y  Tom, ellos eran tan pero tan, pero tan diferente y similares a la  vez.

“Tom ¿Qué me has hecho?”
-¿Tu como dormiste?- Me pregunto Sam de la nada. -¿Sigues confundida con lo de Tom?
-Sam…..
-¿Por qué no aceptas que lo amas?
Me recosté en la cama para quedar a un lado de ella.- ¿Aun sigues aferrada a eso?

No podía decirle a  Sam sobre mis sentimientos  hacia  Tom, porque esta es capaz de  decírselo a  Bill y por nada del mundo quiero que  Tom se entere.
-No me  vas a  contestar ¿Verdad? –Me pregunto ella y yo negué. –Eso es cruel de tu parte  Silver.

Reí mientras recordaba los  momentos que había  pasado con el.

Mi vida se había hecho un lio desde que conocí a Tom, sin querer mi vida estaba girando  a su alrededor, es como si el fuera mis  ojos.

¿Había hecho bien al enamorarme  de el? No lo sé.


Nos quedamos ahí un momento mas hablando de las cosas que Samantha sentía por Bill, de lo grandioso que había sido el momento que se declaro y todo lo que ella sintió.


A las cinco de la tarde.

Sam y yo habíamos terminado nuestras  labores de casa  porque Bill había dicho que  llegaría como a la seis de la tarde.
-¿Cómo crees que será la reacción de  Tom? –Le pregunte  a Sam.
Escuche un claro suspiro de su parte.- No lo sé la  verdad.- Admitió.- Tendríamos que esperar  a que lleguen para  ver que hace.


Narra Bill

Baje de  coche con la  comida favorita de cada una y los mas seguro es que me estaba esperando porque me  había pasado del tiempo que había  confirmado mi llegada.

Toque el timbre unas tres  veces y segundos después la  mujer mas  bella que he visto en mi vida apareció.
-Estamos muriendo de hambre.- Me dijo con esa sonrisa que a tanto me  gustaba.
-Trafico.- Le asegure al momento que ella me seguía sonriendo.- ¿No merezco un beso?
-¿Por llegar  tarde?- Me pregunto ella como respuesta y yo le hice pucheros. –Con esa  cara te daré mil besos.
Sonreí.- Que sean un billón empezando ahora.
Le di  un  beso para empezar ese billón, que agradable fue  darme cuenta de que ella tenia las mismas ganas que  yo por empezar esos  besos.

Era tan delicada, dulce y la loción que ella usaba, simplemente me  volvía loco.
-No puedo ver, pero he de suponer que es lo que hacen. – Dijo la  voz de Silver con un poco de  burla.
Deje de  besar a  Sam con pena y la  abrase. – ¡Hola!
Ella sonrió- ¡Hola!- Me dijo.- En hora buena.- Dijo ella.
-Gracias Silver.- Le  agradecí emocionado.- Esta  chica es mi vida.
-He de imaginarlo.- Me dijo.- Pero tengo advertirte en nombre de mi familia  que si le haces daño, te las veras conmigo.- Dijo riendo.- Puedo ser  realmente peligrosa.
Sam y yo estallamos a carcajadas.- Lo tomare en cuenta.- Le dijo mientras  paraba de reír.
-Ahí donde la vez.- Dijo Sam.- Silver es cinta negra en Karate y  antes del accidente  si le puso una buena paliza a una chica en un centro nocturno en Napa.
La mire sorprendido.- ¿Es enserio?
-La  chica me quería  quitar a mi hombre.- Dijo ella con sarcasmo.
Cosa que me confundió.- ¿Me están hablando enserio?
Las dos rieron.- No, la  ex novia del chavo con el que ella  bailaba.- Dijo Sam.
-Que después fue mi novio.- Explico Silver.
-Ah, si es  cierto.- Dijo ella con coraje.- Bueno, ella era la ex novia y le  hizo una escena de celos porque el bailaba con Silver.
-Y yo no me iba a dejar,   así que me defendí.
-Trato de imaginarlo, pero simplemente no puedo.- Asegure.
-Lo sé.- Dijo Silver.- Soy una  joven tan buena.- Argumento antes de estallar a risas.
-No le hagas caso Bill.- Me dijo Sam.- Tiene  un rato diciendo muchas ocurrencias.
-Ah, se lo que es vivir con una persona ocurrente.- Le asegure.
-Hablando de personas  ocurrente ¿Dónde esta Tom? ¿No se vino contigo?
Me le quede viendo.- ¿Cómo?

Narra  Sam

La expresión de Bill definitivamente no era la que esperaba, se  veía  confundido y mas que todo sorprendido.
-¿Cómo?- Pregunto.- ¿No vino?
Silver arqueo las cejas.- ¿Venir? ¿Se supone que venia contigo, no?
-No.- Dijo el mientras me miraba. – ¿No se vino a despedir?
Silver dio un paso atrás.- ¿Despedir?
-Si.- Confirmo Bill.- Salió rumbo Alemania hace una hora.
Silver se acercó al sofá mas cercano.- ¿Se fue?
Bill me volteo a ver.- ¿No vino? – Yo negué.- Me dijo que vendría antes de irse.
-Pues no llego.
-A lo mejor se arrepintió en el camino.- Dijo Silver poniéndose de pie.- Si me disculpan, me duele la cabeza y prefirieron dormir.
-Pero he traído la comida.- Le dijo Bill  con tristeza.
-He perdido el apetito.- Dijo mientras caminaba hacia su habitación.- Disfruten de la velada.


Narra Bill

Vimos como se alejaba de nosotros para entrar al pasillo.
-¿Cómo que se fue?- Me pregunto Sam cuando vio la oportunidad para hacerlo.
-Tuvo unos pendientes que hacer de emergencia.- Le mentí muy a mi pesar.
-¿Cuándo regresa?
Me encogí los  hombros.- No lo sé exactamente.
Ella se sentó en un sofá  y me indico que la acompañara.- Es muy extraño ¿No crees?
-¿Te dijo Silver que paso ayer?- Le respondí con  otra pregunta.
Ella asintió.- Esta apenada  por la forma en la que actuó, pero se sintió sobre protegida.
-Tom se dio cuenta.- Le dije yo. –Es esta mas apenado por la forma en la que reacciono, sabe que no debió.
-A lo mejor,  pero sabemos como Silver odia que la sobre protejan por su discapacidad.
-Créeme la ceguera no  tiene nada que ver con eso.- Le confesé.
-¿Cómo?- Me pregunto al realmente entender  lo que quise decir.
-Eso, el la protegería aunque ella pudiera ver.

Narra Silver

La partida de  Tom me dejo realmente sorprendida, definitivamente no me lo esperaba ¿Por qué se  fue? ¿Por qué no quiso despedirse de mí?

Justo ahora que estoy tan segura de lo que siento, ahora que  cualquier  cosa que el haga me puede  lastimar, cualquier golpe seria la muerte para mi; el decide irse ¿Para alejarse de mi?

Me recosté en mi cama aun con la ropa que tenia  y mi mente  empezó a imaginar  lo peor de lo peor.

Probablemente el ya no quería verme  y esta partida la había  para  dármelo a entender. ¿Qué hare sin el? ¿Por qué tenia que pasar? Por eso no me quería enamorar de nadie y menos de él, una  persona  como él no podría enamorar de una ciega como yo, seria una completa  carga y eso él no podría  sopórtalo.


Y así con esos pensamientos, pasaron cinco días ¡Cinco días!  ¿Y Tom?

Ni una sola llamada de su parte, día y noche me la pasaba  pendiente de mi móvil esperando una  llamada que nunca  llego.  Fui testigo de unas  llamadas que él le había  hecho a su hermano pero a mi, ninguna, ni un saludo, ni nada.

Sam me comento que el viaje que había  hecho era estrictamente  de trabajo, pero yo sé que no es cierto, él se fue  para alejarse de mí, para  alejarse de esta ciega que le estorbaba.


Sam para distraerme me había  convencido de que fuéramos a un chequeo medico. Ahí el doctor me dijo que una  nueva intervención quirúrgica donde  tenia la  sesenta por cierto de probabilidad de  recuperar mi vista.  Mi prima estaba  mas que emocionada, pero yo no.

Una de las razones era que esa  operación costaba una  muy buena cantidad, una cantidad que no teníamos y otra de las razones era que me  faltaba el apoyo de el (El innombrable en estos momentos).

Me había hecho a la idea de  olvidar la amistad que tenia con el,  olvidar que yo era su pequeña porque solo el pensarlo me dolía. Bill  trataba de decir que  él estaba trabajando y que volvería en los próximos días, pero lamentablemente yo no le creía porque se  fue sin despedirse, si las cosas  anduvieran bien entre nosotros,  se  hubiera despedido.

Pero él hubiera no existe.

Era un domingo por la mañana, yo estaba  sentada en la barra de la cocina tomando un poco de jugo de naranja, cuando entro mi primar.
-Buenos días Silver.
-¡Hey! ¿Cómo te fue?
-Bien y lo mejor fue la paga.
Me sentí mal.- Sam,  nos has descansado desde el miércoles.
-Si lo sé, pero necesitamos el dinero para  la operación.
-Sam….
-No empieces  Silver, te operaras y punto.- Me dijo casi regañándome.- He estado pensando en vender la casa de Napa.
-¡¿Qué?! Estás loca.
-No, si vendemos la casa completaremos  para la operación.
-No, la casa de Napa no.
-¿Por qué?
-Si algún día recupero la vista, quisiera volver a Napa.
-Pero ¿Por qué? Pensé que te  gustaba  vivir en Los Ángeles.
No quería decirle que era para alejarme de él, quería estar lo más lejos  posible y aunque  Napa estaba a un par de horas, era un lugar que me gustaba  para vivir tranquilamente. –Me más gusta Napa.
El timbre se escucho y supusimos que era  Bill.- No dejaremos este tema Silver.- Dijo mientras escuchaba que se ponía de pie.

Mi teléfono sonó y lo busque de inmediato, una vez mas ilusionada a que  podía de él.
-¿Hola? –Respondí.
-Princesa.- Saludo la voz de Kaleb “Así o mas estúpida Silver, Tom no llamara.”
-Hola Kaleb ¿En que te puedo ayudar?
-Dudaba en hablarte después de la ultima  vez que no vimos.- Dijo el.
-Si son cosas laborales,  lo tienes que hacer ¿Cierto?
Se escucho una risa.- De hecho. –Acepto el.- ¿Has terminado con el libro?
-Si, justamente  ayer.
-¿Podrías venir mañana?
-Dime a que hora.
Un BIP se escucho al otro lado del teléfono.- Princesa, dame oportunidad ¿Te marco en cinco minutos?
-Está bien.
Y corto la llamada, para segundos después  volver a sonar.

En esta ocasión no pensé que fuera  Tom.
-Pensé que eran cinco minutos Kaleb.- Le dije  mientras  reía un poco.
-Creo que no soy la persona que esperabas.- Dijo una voz que estuve esperando por días escuchar.

Narra Tom

Sentí un nudo en la garganta cuando escuche el nombre de Kaleb saliendo de los  labios de  Silver.
-Creo que no soy la persona que esperabas.- Le dije después de aclararme la garganta.
Unos segundos de silencio pasaron hasta que ella decidió hablar. –Tom.
-¿Esperabas a Kaleb?
-Acabo de cortar con el por teléfono, quería saber del libro que me dejo.
-Ah ¿Cómo estas?
Un suspiro se escucho.- Confundida.- Dijo ella.- No te despediste.
Trague saliva nuevamente.- No pude, la ultima vez que nos  vimos  no terminamos bien.
-Lo sé.- Acepto ella.- Pero esperaba que habláramos.
-Yo aun lo espero.
-No por teléfono.
-Regreso mañana.- Le dije  con nervios.- ¿Podemos vernos?
Otros segundos de silencio.- En la mañana tengo que ir a dejar mi trabajo.
-Llego a las  cinco de la tarde.
Otro silencio.- Está bien.
-Te veo mañana entonces.- Le dije.-  Te llevare a un lugar,  ponte algo cómodo.
-Si. –Acepto ella.- ¿Nos vemos mañana entonces?
-Llego como a las seis.
-Si. – Dijo ella.- Hasta mañana.
Escuche claramente cuando se corto la  llamada y suspire.- Hasta  mañana Silver, te amo.

Si, la amo más que nada en este mundo, lo confirme en estos días que estuve sin ella.